Salud Mental
Noviembre 7 de 2024

Tasa de Homicidios-Georeferenciado

Indicador - Gráfica

La Tasa de Mortalidad por Homicidios es el número total de defunciones estimadas por homicidios en una población total o de determinado sexo y/o edad dividido por el total de esa población, expresada por 100.000 habitantes.

 

Ficha Técnica

Mortalidad por Homicidios-Forensis (INMLCF)

Definición La Mortalidad por Homicidios (MHom) es el número total de defunciones estimadas por homicidios en una población total o de determinado sexo y/o edad dividido por el total de esa población, expresada por 100.000 habitantes.
Metodología de Cálculo MHom=(No.total de defunciones estimadas por Homicidios en una población / No. total de población ) x  100.000
Fuente del Numerador Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses
Nota: hasta el año 2020 se tomaron los datos de los informes de Forensis. A partir del 2021 se toman en cuenta cifras de lesiones de causa externa del Observatorio de violencia 
Fuente del Denominador Retroproyecciones de población departamental para el periodo 2005-2017 y Proyecciones de población departamental para el periodo 2018 -2050 con base en el Censo Nacional de Población y Vivienda - CNPV- 2018.
A partir del año 2020 se toma la serie departamental de población por área, sexo y edad para el periodo 2020-2050 según actualización POST COVID-19
Unidad de medida No. de muertes por 100.000 
Línea de base (Valor/Año) 58,39 (1999)
Responsable del cálculo Así Vamos en Salud
Nivel de desagregación

*Nacional

*Departamental (2005-2023p)       

Serie disponible 1999 a 2023p
Periodicidad Anual

 

Mortalidad por Homicidios-EEVV (DANE)

Definición La Mortalidad por Homicidios (MHom) es el número total de defunciones estimadas por homicidios en una población total o de determinado sexo y/o edad dividido por el total de esa población, expresada por 100.000 habitantes.
Metodología de Cálculo MHom=(No.total de defunciones estimadas por Homicidios en una población / No. total de población ) x  100.000
Fuente del Numerador Estadísticas vitales DANE- Defunciones no fetales - Cuadro 5 de defunciones por grupo de edad y sexo, según departamento, municipio de residencia y grupos de causa de defunción
Fuente del Denominador Retroproyecciones de población departamental para el periodo 2005-2017 y Proyecciones de población departamental para el periodo 2018 -2050 con base en el Censo Nacional de Población y Vivienda - CNPV- 2018.
A partir del año 2020 se toma la serie departamental de población por área, sexo y edad para el periodo 2020-2050 según actualización POST COVID-19
Unidad de medida No. de muertes por 100.000 
Línea de base (Valor/Año) 65,05 (1999)
Responsable del cálculo Así Vamos en Salud
Nivel de desagregación

*Nacional

*Departamental (2005-2023p)       

Serie disponible 1999 a 2023p
Periodicidad Anual

Análisis

¿Qué dicen estos datos?

 

El homicidio intencional es el delito máximo y es la manera de muerte que ocupa el primer lugar a nivel mundial. Dicho fenómeno tiene efectos que van más allá de la pérdida de la vida humana, ya que arruina la vida de la familia y los núcleos sociales más cercanos de la víctima. A su vez, tiene un impacto negativo en la sociedad, la economía y en las instituciones gubernamentales. El homicidio no se limita a un cierto grupo determinado de personas, al contrario, puede llegar afectar a toda la población, independientemente de su edad, sexo, origen étnico y antecedentes socioeconómicos.

El estudio del homicidio intencional es relevante no solo por la gravedad del delito, sino también porque el homicidio intencional es uno de los indicadores con mayor oportunidad de medición y comparabilidad para monitorear las muertes violentas. De acuerdo con el último Estudio mundial sobre el homicidio de la Oficina de las Naciones Unidas contra la droga y el delito (UNODC) indica que entre 2015 y 2017, el número total de víctimas de homicidio en todo el mundo aumentó en un 4%, y América Latina tiene la mayor tasa de asesinatos registrando 17,2 por cada 100 mil habitantes, seguido de África (13), Europa (3), Oceanía (2,8) y Asia (2,3) (UNODC, 2019).

Por otra parte, es importante destacar que las tasas de homicidio han venido disminuyendo, pero no lo suficientemente rápido para alcanzar las metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible 16, el cual pretende promover sociedades pacíficas e inclusivas, facilitar el acceso a la justicia para toda la población y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas a todos los niveles. Asimismo, indica que las personas de todo el mundo deben vivir libres del miedo a cualquier forma de violencia y sentirse seguras en su día a día, sea cual sea su origen étnico, religión u orientación sexual.
Sin embargo, los conflictos actuales y las nuevas guerras de algunas partes del mundo están desviando el camino global hacia la paz y hacia la consecución del Objetivo 16 (ONU, s.f). 

En 2017, se registró una tasa de 6,1 víctimas de homicidio por cada 100.000 habitantes en todo el mundo, en comparación con una tasa de 7,4 en 1993. Si bien aún existen vacíos en términos de calidad y disponibilidad de datos nacionales, estas estimaciones se basan en los datos más recientes y completos presentados por los Estados Miembro a la UNODC hasta 2017.

Al analizar el comportamiento de la tasa nacional durante el último decenio en Colombia, se mantiene la tendencia al descenso, registrando la tasa más baja para 2020. De 32,45 casos por cada 100.000 habitantes en 2013, bajó a 24,61 en 2020 lo que significa una reducción del 24%, sin embargo, el descenso más significativo se muestra entre 2013 y 2014 con una diferencia de 1.668 homicidios.  El 2020 fue un año caracterizado por las repercusiones de la pandemia por COVID-19 en todos los niveles de la sociedad, también por el descenso en los homicidios, especialmente durante los meses de confinamiento. Las cifras evidencian un descenso en el número total de homicidios, pues en el 2019 se presentaron 11.880, 12.130 en 2018 y 11.326 en 2020. Aunque la cifra en 2021 incrementó, lo cual puede estar asociado al hecho de la flexibilización de las medidas de confinamiento por la pandemia del COVID-19 y el retorno a actividades fuera de los hogares, a manera de efecto rebote al encierro prolongado (IMLCF, 2021).

Si bien es cierto que este comportamiento resulta estimulante en términos de política pública contra la violencia, no hay que perder de vista los departamentos y municipios que durante los últimos años superan de lejos la tasa nacional, un ejemplo de ello sucede con los departamentos del Valle del Cauca, Arauca, Cauca, Antioquia, entre otros. 

Para el año 2023 (datos preliminares según el DANE), se registraron un total de 14.390 homicidios en todo el territorio nacional y la tasa preliminar registrada para ese año fue de 21,81; es decir que los homicidios bajaron aproximadamente en un 2% respecto al año anterior (2021). Al analizar el comportamiento por departamentos para el 2023, las entidades territoriales de ese orden que presentaron las mayores tasas de homicidios fueron San Andrés y Providencia (57,81), Valle del Cauca (33,12), Sucre (25,95) y Caquetá (24.00), regiones donde ocurren enfrentamientos entre grupos armados por el control de territorios, o son escenario de economías ilícitas como la droga, el oro y el contrabando.

Teniendo en cuenta los resultados anteriores, hay que mencionar que Colombia es un país de gran diversidad sociodemográfica, lo cual repercute en el comportamiento del homicidio de acuerdo con los fenómenos propios de cada región. Los homicidios, además de ser un problema grave a nivel social, evidencian una problemática sin respuestas efectivas, relacionada con pocas habilidades sociales y deficiente capacidad para resolver conflictos entre personas, situación que requiere un adecuado abordaje desde el Estado y desde cada persona que integre las regiones de Colombia (IMLCF, 2022).

Al respecto, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses hacen una serie de recomendaciones para los tomadores de decisión en este tema:

 

Referencias